XOVES 9 ABRIL 2015
“No nome do Pai e do Fillo e do Espírito
Santo” Amén
NOTICIAS DE
ESPERANZA
Contigo hai vida porque nos enchemos de esperanza. Cada
día cando nos erguemos, se poñemos a tele, escoitamos a radio ou lemos as
noticias encontrámonos un montón de enquisas ou de estudos que nos intentan
mostrar o "mal que van as cousas". Non obstante, hai uns días
recibimos a mellor noticia que nos poderían ter dado, a noticia máis
esperanzadora:
(Mc 16,1-7): «Xesús de Nazaret, o Crucificado. Resucitou»
Esta noticia que recibimos na Vixilia da Pascua de
Resurrección tennos que facer reformularnos as cousas, reformularnos a nosa
vida e tinguila de esperanza. Xesús resucita precisamente por iso, para encher
as nosas vidas de esperanza.
Se miramos a noso arredor, estou seguro que somos capaces
de encontrar máis actitudes cheas de esperanza que actitudes negativas.
Propoñémosvos un video que mira un pouquiño máis alá destes estudos, das
estatísticas, e de todas esas cousas que aparecen nas noticias e busca unha
interpretación positiva de todas elas, chea de esperanza… Porque nesta Pascua
podemos cambiar as cousas e podemos sentirnos felices. Intentemos darlle a volta
a todas esas situacións que se nos presentan, e sexamos capaces de, á luz da
esperanza da Pascua, ver a parte positiva de cada situación e de cada momento
que o día nos regale.
VENRES 10 ABRIL 2015
“No nome do Pai e do Fillo e do Espírito
Santo” Amén
Segundo o pensamento cristián, na orixe e no ser mesmo da
vida encóntrase sempre a Deus. Consecuentemente, é a luz que emana desta
postura a que mostra a enormidade da doutrina cristiá sobre o valor da vida.
Unha cita do Evanxeo (Xoán 14:6)
Tomás díxolle: Señor, se non sabemos onde vas, como imos
coñecer o camiño? Xesús díxolle: Eu son o camiño, e a verdade, e a vida;
ninguén vén ao Pai senón por min. Se me coñecésedes, tamén coñeceriades o meu
Pai; e dende agora coñecédelo e vístelo.
Oración: (un poema de Gloria
Fuertes)
UN HOMBRE PREGUNTA…
¿Dónde está Dios? Se ve, o no se ve.
Si te tienen que decir donde está
Dios, Dios se marcha.
De nada vale que te diga que vive en
tu garganta.
Que Dios está en las flores y en los
granos, en los pájaros y en las llagas,
en lo feo, en lo triste, en el aire,
en el agua;
Dios está en el mar y a veces en el
templo,
Dios está en el dolor que queda y en
el viejo que pasa
en la madre que pare y en la
garrapata,
en la mujer pública y en la torre de
la mezquita blanca.
Dios está en la mina y en la plaza,
es verdad que está en todas partes,
pero hay que verle,
sin preguntar que dónde está como si
fuera mineral o planta.
Quédate en silencio,
mírate la cara.
el misterio de que veas y sientas,
¿no basta?
Pasa un niño cantando,
tú le amas,
ahí está Dios.
Le tienes en la lengua cuando cantas
en la voz cuando blasfemas,
y cuando preguntas que dónde está,
esa curiosidad es Dios, que camina
por tu sangre amarga,
en los ojos le tienes cuando ríes,
en las venas cuando amas,
ahí está Dios, en ti,
pero tienes que verle tú,
de nada vale quién te le señale,
quién te diga que está en la ermita,
de nada,
has de sentirle tú,
trepando, arañando, limpiando,
las paredes de tu casa:
de nada vale que te diga que está en
las manos de todo el que trabaja,
que se va de las manos del guerrero,
aunque éste comulgue, practique
cualquier religión, dogma o rama;
huye de las manos del que reza y no
ama,
del que va a misa y no enciende a los
pobres velas de esperanza;
suele estar en el suburbio a altas
horas de la madrugada,
en el hospital, y en la casa
enrejada.
Dios está en eso tan sin nombre
que te sucede cuando algo te encanta,
pero de nada vale que te diga que
Dios está en cada ser que pasa.
Si te angustia ese hombre que compra
alpargatas,
si te inquieta la vida del que sube y
no baja,
si te olvidas de ti y de aquéllos, y
te empeñas en nada,
si sin por qué una angustia se te
enquista en la entraña,
si amaneces un día silbando a la
mañana
y sonríes a todos y a todos das las
gracias,
Dios está en ti, debajo mismo de tu
corbata.
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